miércoles, 29 de enero de 2014

Momentos

Esos momentos en que miras al rostro de esa persona y piensas:
"es él",
 " es mío ", 
" dios, es lo que yo realmente ansío y quiero",
 " es lo que yo me he propuesto y al fin.. lo tengo"... 
Es orgullo, ganas, emoción... 
es la mejor droga en sangre.

Es imposible decir con exactitud las mismas palabras.
 Son como las típicas cosas que solo se pueden decir  una vez.
 A la segunda, pierde la magia.
 No se dice con la misma intensidad, ni en el mismo segundo.. 
el momento perfecto se esfuma.

Y sinceramente esos pensamientos y esas palabras últimamente han sido tan efímeras.. tan cortas en el tiempo, 
que a veces creo que me canso de lo que siento. 

"Podíamos escribirnos miles de cartas, pero nuestro corazones no se acercarían ni un centímetro"

Esta frase, supongo que se puede trasladar a varios contextos. 
Cambiando unas palabras por otras, pero diciendo exactamente lo mismo. 
Al final, no vale ni un carajo, porque no va a cambiar nada.



martes, 28 de enero de 2014

The last high

Plastificamos los corazones, pero no ponemos chaleco antibalas.
¿Que de qué va la canción? 

Lo cierto es que son las gilipolleces que hacemos siempre.
 Teniendo a seis mil millones de personas en el mundo, las risas de unos mil, el sexo de unos cincuenta, la conversación de unos treinta y el amor de unos diez, cinco nos putean, y otros cinco no los queremos, y...  !!REDOBLES!!
Aparece el sujeto 0.
 Por ser el número que es, ya sabéis lo que da y lo que merece recibir.

Y a pesar de tener alrededor todas esas "tentaciones", nos juramos y perjuramos que será el último. Ya sea metafóricamente, en silencio, en carne, o en alma. O simplemente viva en tus sueños.

Puede que solo haya sido una noche, o unas cuantas horas.. una mirada.. 
Pequeños detalles.
Los echamos de menos.
Nos odiamos,
 pero aún así nos queremos un poquito con el dedo corazón,
de vez en cuando.

Pero si lo pensamos bien,
hasta que no haya claros entre tanto borrón, 
y tantos papeles arrugados,
mejor reservarlo en ese plástico
a expensas de que algún rasguño te roce.
Pero,
viviendo así, es como si se te escapara,
y a la misma vez teniéndole,
pero con esas mil historias a la vez,
esas risas, ese sexo, y ese hamor.


And maybe you'll call me, maybe you won't. 




domingo, 19 de enero de 2014

Recaídas

Y después de tantos tiras y aflojas,
detrás de esos no sés que eran síes,
de tanta Venecia sin agua,
te das cuenta de que pasas página.

Al carajo el juego,
y los cigarros a medias,
si quieres te los fumas,
sino los tiras contra el asfalto.
Puedo dormir tranquila noche tras noche.

No me definen mis errores.

Se abre un libro nuevo, 
con alguna que otra historia renovada,
la historia es cíclica,
y las recaídas también.

No hay marcapáginas,
porque para no quedarte estancada en una historia
lo mejor es no pararte en ninguna de ellas
y simplemente
hojear el libro.

.

domingo, 12 de enero de 2014

Bienvenido al club

Hay miradas que calan, 
besos del final,
polvos de despedida,
y abrazos que rematan.

Y es cierto que,
la distancia cuando es cero
duele más.

Y sí, me gustaría disimular,
tener un puto disfraz.
No ser tan predecible,
no abrirme siempre de par en par.

Y aún así me dejo palabras en el tintero,
no sirve de nada,
dejo de morderme la lengua,
pensando que tal vez sea mi momento.

La verdad no es esa, y  no la queremos ver.
Siempre apostamos sabiendo que habrá 
un resacón el día después.

Somos tontos, idiotas,
imbéciles, porque queremos.
Que triste es.

No  queremos evitarlo.
Se empaña nuestro espejo,
y qué mas da una mancha más
entre tanto garabato.

Malditos microcuentos


Lo peor es que
al final de todo
la que se queda con tu olor en mis manos
soy yo.

miércoles, 8 de enero de 2014

Let it be

A veces lista, otras guapa.
De apariencia normal, y otras muchas rara.

Otras sin pintar y con pintas bizarras.

Otras tantas tierna, otras malhumorada.

Siempre conformista,

pero quiere licor y otras copas de más.
Se cansó de la cerveza,
y quiere el mejor whisky, 
aunque la resaca le dure más que la ebriedad.

Y sí, soy tonta, puede ser. 

No sé si he arriesgado mucho, 
o he perdido.

Porque en un sólo minuto puedo sentir tanto

y de pronto tan poco.

Sé que no debo pero el querer puede más.

Ahora apareces pero en nada te esfumarás.

Tantas sombras alrededor mía,

a saber cuál me iluminará.
Por un tiempo efímero,
o para superar mi récord quizás.

Ayer eran días, antes de ayer eran horas,

ahora son meses que pueden caber en una postal.

Y ahí están, jodiéndote la vida,

sin saber que camino escogerán, 
y en realidad, lo sabes,
van a todas partes.

Puro placer,

evadirte de las penas,
respirar otro aliento,
abrir de par en par mis extremidades.

Qué se yo,

si al final no sabemos nada.

Y si te me pones tierno,

no, gracias,
no quiero sentirme importante.




domingo, 5 de enero de 2014

Acostumbrarse

El error es 
que los recuerdos se distorsionan
 y al mirar atrás siempre todo se ve más bonito de lo que parece. 
Se reconstruyen, se filtran y al final se contaminan.
Ese es el problema.
Te recordaba tan perfecto, tan nosotros... 


Olvidé que,
conllevaba a dar un todo, el todo que siempre colma el vaso.
Y aún estando al 100%, a veces darlo todo es un gran error.
Decir ciertas cosas en momentos contradictorios,
lo excesivo, hace que te eches el freno de mano.

Ese todo que ahora no quiero.
Es mejor ser un todo por separado, no ese cuento de las mitades que nos han contado.
Primero se feliz por ti mismo.
Mírate en el espejo 
¿eres realmente lo que quieres en otra persona?

No deseo un para siempre, pero sí un quizás.

Tan cambiante, tan persistente..
Moldeándote a mi parecer perdías la esencia.
Y qué tontería, si al final..

Seguimos siendo la misma base,
pero supongo que los detalles tontos pesan más.

Ni tú me conoces ni siquiera me conozco a mí misma.
Siempre hay una primera vez para todo.
Nunca digas nunca.
Lo típico.
Y tenía que ser contigo.

No puedo, y menos contener la tensión... 
Que me claves, que el silencio sea tan tentador..

Menuda noche bizarra. 
Mejor pasar, mejor será... Mejor será dejarse llevar. 
Y si los sueños no mienten, que solo te vea como yo te miro en sueños, cual almas libres.
No es que me cueste pillarme, 
será que mi sino es juntarme con fuego,
pues siendo hielo me helaste,
Siempre ese caballero de acero, tan pasota, tan misterioso.
Seré masoquista.

De todo se aprende, miras hacia otro lado y te encuentras con personas vestidas con prioridades que yo misma obviaba.
La novedad, una mirada, qué se yo.
Todo lo bueno acaba.
Aún así, me siento pletórica, aunque se me haga un nudo en el estómago.
A veces los errores son aciertos,
y creo que ya nos hemos hecho demasiado daño,
de tanto roce nos hemos hecho rozaduras
de pensamientos, prejuicios,
cambiamos los sentimientos,
pero sigo en la misma estación.
Y aunque sé que quieres caminar a mi lado,
seamos coherentes,
seguiré con miles de garabatos en mi cabeza.

Olvidé lo malo,
 tu mal humor, tus celos, tu intentar no sé el qué...
Me habré desviado de tu lado, 
pero a mi parecer tus pasos se torcieron en algún minuto de nuestra canción.
Siempre buscándome en tus planes,
no bajando nunca el telón,
yo dije venga, tú dijiste vale,
porque esto no era lo que tú querías
un punto aparte sin final, dejar la puerta siempre abierta,
y ya me viste tan cerca que no parábamos de rozarnos,
me viste saltar de calentón en calentón sentimental,
sin disimular,
llamabas a mi portal y te esperaba siempre despierta.

Y sí, lo sé, me ofreciste lo que tenías,
nadie puede negar eso.
Pero nuestra canción se acaba,
ya no hay noche para más.

Hasta aquí nuestro último baile.