Las actitudes me sorprenden, ni yo misma se hasta que grado me llegan a sorprender.
Y lo mejor es que me espero la caída y luego actúo, luego respondo. Las personas no pasan por tu vida en vano, siempre pasan por algo bueno o algo malo, y debes aprender de ello.
No entiendo cómo de la noche a la mañana alguien pasa a ser ordinario, uno más, sin ningún sentimiento asociado a ella cuando antes parecía todo lo contrario.
Todavía me sigo preguntando que en qué momento pasa eso, qué es lo que pasa por nuestra cabeza para cambiar de actitud y actuar como si nada. Es un sentimiento desconocido.
Seré indecisa, pero cuando me decido, me decido de verdad...
Los miedos me pueden, y la palabra arriesgar se va disolviendo, casi no quedar rastro de ella.
Hay que conocer muy bien a las personas o más bien llegar a conocerlas.
Rápido y muy intenso, deja una gran huella. Prefiero ir a fuego lento, poquito a poco para evitar caídas inesperadas. No tengo prisas.
Es como si todo volviese pero duplicado y te hace más escéptico.Pero ahí la esperanza es la que lo jode todo y lo hace una contradicción, una lucha interior.
No caeré en la tentación de ser alguien frío y desconfiado, eso nunca, sería demasidao fácil.
Una mala experiencia no va a cambiar mi forma de percbir a las personas.Sólo se que no es el momento, por ahora no hay más ganas de correr, sino de descansar, reflexionar y conocer. Algún día retomaré el camino hacia ese destino al cual no llegué porque me cortaron el camino.
Y llegas a la conclusión de que: las malas experiencias no te determinen, que no controlen tus pensamientos, que no dominen a tu ser, que no repriman tus deseos, tus sentimientos...
Que no hay que meter a todo el mundo en el mismo saco, y yo misma lo sé, y yo misma no lo hago. No dejes que controlen tu forma de actuar, es muy malo.. y casi INEVITABLE no hacerlo.
Llegas a una situación en el que has subido y bajado tantas veces que te quedas en un punto muerto sin saber qué hacer, si esperar a subirte otra vez o quedarte ahí sabiendo que más bajo no puedes caer.
Que por más que te repitas que a veces hay que aprender lo que es bueno para tí, nos gusta lo imposible.
Estoy harta de curvas senoidales.
No se cuánto tiempo estaré en este punto muerto, supongo que hasta que llegue algo que me de el empujón para subir de nuevo sin miedos.
Las cosas no pasan como queremos, y hay cosas que no puedes controlar,y pasan cosas que ni siquiera te las habrías podido imaginar.
Esa seguirdad que sentiste, se ha desvanecido por completo, y dices ¿cómo pude sentir eso? me volvi loca por unos momentos, las ilusiones...las famosas ilusiones.
Cuando te da cariño una fuente vacía donde sabes que no puedes sacar nada crea mucha confusión, qué pena, no soy de piedra. Y al final no es nunca cómo esperabas.
Un calentón sentimental.
Es como si todo volviese pero duplicado y te hace más escéptico.Pero ahí la esperanza es la que lo jode todo y lo hace una contradicción, una lucha interior.
