Todo vuelve.
Cuando decían que la historia es cícilica,
no se equivocaban.
Y no porque las cosas pasen una y otra vez,
no se equivocaban.
Y no porque las cosas pasen una y otra vez,
sería de locos.
Pero quien no te dice que vivamos en un bucle eterno en el tiempo, que nuestras memorias se borren y no lleguemos nunca a conocernos ni a aprovechar todas nuestras facultades;
y que todo lo demás,
la historia, las leyendas...
sean otra mentira para sentirnos mejor con nuestras limitaciones.
Quién me puede negar que esto no lo haya pensando antes, que nunca te he mirado a los ojos y que cada vez que lo hice sintiera una chispa cada vez más fuerte.
Una conexión.
Pensar en lo que te has perdido o no...
simplemente el tiempo es sabio y te pone allí, en el momento justo para que se haga la magia, esa que sale sola y nunca nunca se puede forzar.
Supongo que prefiero pensar que ese fue nuestro minuto cero.
Y si te conocí en otra vida
o se volviese a repetir la experiencia
sé que nos encontraríamos aunque sea en medio de la Siberia más fría.
Qué decir de esos primeros siete segundos.
Son fatales.
Escaneas a la otra persona de arriba a abajo y sientes que es otra más.
Cómo cambian las sensaciones,
la percepción en sí.
Es mágico, inquietante como poco a poco cada paso y cada suspiro suyo forma parte de ti.
Es una reflexión muy efímera.
Pero.
Ya no hay peros.
Quiero, y digo de verdad,
quiero.
Ahora mismo a los que quiero más que nunca.
No miedos,
No miedos,
ni inseguridad de mostrar el yo que llevo dentro al mundo.
Proyectos, sueños, inquietudes. Hacerlos tangibles.
Ya no me conformo con fantasear.
Porque como ya he dicho todo vuelve..
Proyectos, sueños, inquietudes. Hacerlos tangibles.
Ya no me conformo con fantasear.
Porque como ya he dicho todo vuelve..
Y ahora es mi momento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario